Algo que a muchos nos ha despertado la era COVID es darnos cuenta de nuestra necesidad de estar más en contacto con la naturaleza, vivir en espacios algo más amplios y, sobre todo, con un lugar donde podamos tomar el aire, tipo terrazas, patios… que se convierten en la estancia central de la casa. Es por este motivo que nos toca ponernos las pilas y crear nuestro propio trabajo, bien a través de un negocio físico, tal como lo conocemos, una tienda, taller, etc., ofreciendo nuestros servicios o montándonos algo en internet. Por eso, en esta sección quiero ofreceros todas las posibilidades que nos ofrece la red para ganarnos la vida.

¡OJO! Si tu objetivo es ganar dinero fácil y rápido te recomiendo que te dediques mejor a la venta de alguno de los productos que hay por el mercado del tipo productos de belleza, envases para conservar la comida, juguetes eróticos o robots de cocina. Montar un negocio en la red necesita su tiempo de aprendizaje, visibilización y fidelización de clientes, es decir, entre pitos y flautas échale tres años de media.

Primer paso: Hazte visible.

De todos es sabido que la red es un gran escaparate en el que vendemos una imagen a los demás a través de las redes sociales. Colgamos en Instagram momentos de felicidad y compartimos en Facebook ese viaje de fin de semana o si hoy es mi cumpleaños que lo sepa todo el mundo a través de los estados de WhatsApp. ¿Qué te voy a contar que tú no sepas? Pues que ya que mostramos nuestra imagen vamos a hacerlo bien. 

Una de las múltiples opciones que tenemos es a través de un blog o página web ya que se puede convertir en tu mejor carta de presentación. Puedes escribir lo que te apetezca si tienes algo que contar, subir fotos de tus productos o vídeos de lo que quieras mostrar al mundo o, incluso, se puede convertir en la mejor sala de exposiciones para mostrarnos tu obra.

Segundo paso: invierte en tu negocio

Todo negocio requiere una inversión y un negocio virtual no va a ser menos pero lo bueno que tiene emprender en internet es que ese presupuesto puede ser mínimo y te recomiendo que inviertas esa pequeña cantidad y no te dejes llevar por los sitios que te ofrecen alojamiento gratis porque están bastante limitados y a medida que vayan subiendo tus visitas, subscriptores y artículos necesitarás, de primeras más espacio, además de un dominio propio, no queda elegante que el nombre de tu tienda sea “cablespaquito.wordger.com”, a los clientes hay que ponérselo fácil para que te recuerden.

Aunque tu blog o página web se quede solo en una afición más, no está de más que inviertas una cantidad mínima. En un año no te vas a gastar más que lo que se te pueda ir en el cine, salir de copas o a cenar o ir a jugar al padel.

En este apartado podemos agregar, además, la formación. Es necesario que tengas una formación continua ya que la red está en constante movimiento y lo que hoy es un boom mañana estará obsoleto. Por el mismo motivo, es necesario que nos mantengamos informados de las últimas tendencias y las tengamos en cuenta, sin caer en el delirio, que también es algo muy común.

Tercer paso: cómo crear un blog.

Como estamos hablando de ganar dinero a través de internet, voy a dejar a un lado abrir un blog gratuito ya que, como he dicho antes, su almacenamiento y funciones son limitados y a la larga necesitarás contratar espacio y trabajar con plugins. 

Ya he hablado un poco más arriba del dominio, por lo que vamos a pasar al hosting: Imagínate que te vas de vacaciones y reservas una habitación de hotel, por ejemplo la 534, pues ya sabes que tu habitación está en la planta 5ª y sólo tienes que buscar la número 34. Hosting significa alojamiento y es exactamente lo mismo que haces con tu página web, tendrás que pagar por el alojamiento de tu página web en cualquiera de los hosting que existen y de este modo, a través del dominio que has elegido, todo el mundo podrá ver tu página y además guardar el contenido que vas colgando en ella con seguridad. Existen múltiples compañías de hosting trabajando y dependiendo de tus necesidades poder elegir una u otra.

Cuarto paso: “Decora el escaparate”.

Una vez que hayas elegido tu gestor de contenidos y que ya tengas contratado el hosting comienza a montar tu blog inmediatamente, sin postergaciones, sin que se te pasen las ganas y sin dejarte llevar por la pereza, dedícale todos los días un ratito (aunque sean solo diez minutos). Elige la plantilla y los plugins que vas a necesitar y los widgets que van a aparecer y comienza a crear contenido para que Google te tenga en cuenta.

¿Qué es un plugin? Un plugin es un complemento para enriquecer tu blog o página web, por ejemplo, si quieres comenzar a vender necesitarás un plugin para agregar el carrito de la compra, si quieres poner música tendrás otro específico para ello o si tu página o blog va a ser internacional, no te vendrá nada mal poner un traductor. Existen infinidad de plugins para cualquier cosa que se te ocurra.

¿Qué es un widget? Forma parte de un plugin y aparecen en nuestro blog o página web en la parte superior, en el lateral o en la parte inferior como accesos directos que nos redirigen a otra parte. El ejemplo más popular y que seguro que todos hemos visto es el de las redes sociales que si lo pinchas nos abre directamente la dirección de dicha página en cualquiera de las redes donde esté presente. Existen otros widgets para darnos información meteorológica o para abrir la aplicación de los mapas de carretera.